El camino Recorrido: Coachella 2007


Revisando las novedades en la tienda de discos encontré un DVD titulado "Coachella". El nombre me era familiar, pero realmente no sabía mucho sobre este festival. revise los contenidos y decidí llevarlo a casa, sin pensar dos veces en las repercusiones de esa compra. El DVD no era la gran cosa, esta un poco mal editado y no todas las presentaciones aparecen completas, pero una cosa que si logra, es transmitir la sensación del festival: miles de personas reunidas para oír buena música en medio de la nada. Inmediatamente revise en internet y, ¡vaya coincidencia! estaba a una semana de que se empezaran a vender las entradas. El line-up era muy atractivo: Björk, Red Hot Chili Peppers y Rage Against The Machine, pero realmente los que me vendieron el festival eran Interpol y una artísta nueva para mi y que me recordaba mucho a Fiona Apple llamada: Regina Spektor. Despues de rumiar un poco la idea, lo decidí; solicité mis vacaciones anuales y le pedí a una amiga que me comprara y enviara los boletos (tres dias mas el camping).

los siguientes tres meses fueron un sueño, escuche mucha música nueva( de bandas que luego veria), hice amigos por internet (que luego conocería) y no podia ocultar mi emoción. Una semana antes la fecha, viaje a Los Angeles, donde aproveche mis vacaciones para pasear con mi mamá por las trampas turísticas tradicionales de Hollywood y visitar a mis tios. Pero aun así revisaba diariamente el sitio de coachella en busca de noticias o cualquier información. me habia convertido en un coachella junkie!

finalmente llego el Jueves, me despedí de mi mamá, tome el carro que me presto mi primo (equipado con mi propia versión de un GPS, una hoja de papel con direcciones) y me dirigí hacia el desierto. una vez en la autopista, ya no había vuelta atrás, estaba en camino. el desirto es un lugar interesante y bello, pasas por formaciones rocosas enormes y de repente ves una ciudad en medio de la nada, o decenas de molinos de viento en fila, sus aspas blancas rotando en contraste con el cielo azul. Finalmente la señalización de la carretera me indicó mi destino final: Indio, Ca.

Las señales eran obvias: las palmeras, varios asistentes caminando hacia los Empire Polo Fields,y muchos carros con rotulos de "carpoolchella". Iba por el camino adecuado. el parqueo no fue díficil de encontrar; un campo de tierra con capacidad para miles de vehículos, donde varios jovenes se ponían loción solar, caminaban con sus equipajes o simplemente bebían al compás del ipod o del stereo del carro.

La cola para entrar al campamento era larga (unas dos cuadras) pero en cuestion de media hora ya estaba en el chequeo que consistió en simplemente que me "tantiaran" el bolsón y me preguntaron si traía armas o drogas. Una vez dentro, imaginense esto: una área que equivalía a quizas un par de kilometros cuadrados, que durante los proximos 4 días se llenaría de fanáticos musicales. y en verdad, el campamento para la mañana siguiente parecia una mezcla entre un campo de refugiados y la comunidad más grande gitanos de la historia. carpas, tiendas de campaña y canopies de todos colores y decorados con mil y un motivos.

Al caminar por los accesos del campamento, no era extraño ver gente leyendo tocando música, fumando (de todo), lanzando frisbees o haciendo cola para ir a tomar un baño o utilizar los toilets (que son las cosas más asquerosas del mundo después de un día). pero lo más común era ver a la gente tirada , tratando de moverse lo menos posible en la sombra para combatir el calor. El clima se volvió un factor importante. a las 5 am. la temperatura podía llegar a 15 grados centígrados pero dos horas después no se podía estar dentro de la tienda de campaña (unos 28-30 grados húmedos).



El horario permitía platicar con tus vecinos de camping, el ambiente muy amistoso ya que todos están allí por la misma razón y anda en la misma onda. Gracias a sus recomendaciones pude oír algunas bandas que desconocía y que me terminaron gustando mucho. Entablar conversaciones con extraños es de lo más normal y amigable, y entre todos se crea un ambiente de fiesta pero relajada.




Cerca del mediodía se abren las puertas del festival, que esta contiguo al camping y es tan grande (aunque creo que más) que este. lo primero que se logra ver son toldos blancos enormes y puntiagudos, donde se encuentran las ventas de souvenirs, los jardines de cerveza y tres de los escenarios más pequeños. el resto de las estructuras varían año con año pero parecían salidas de una mezcla entre los sueños de Dalí y Mad Max (recuerden que Coachella es un festival de ARTES y música). los artístas que abren son poco conocidos o relativamente nuevos, por lo que es fácil encontrar un buen lugar entre la multitud. se ve al equipo técnico preparando los equipos y mientras por los alto parlantes suenan los singles de todos los artístas que se presentaran ese año. de repente la música se detiene y vemos las siluetas del grupo de músicos acercase al escenario, tomar sus instrumentos y darnos la bienvenida a la experiencia sonora de una vida!

continuará...

Comentarios

Edd ha dicho que…
jajaja, si yo considero mi experiencia en el festival imperial como super vergonisima...este trip de coachella debio haber sido como jugar futbol con Dios xD.

y vistes a the arcade fire?